Su principal característica es su tamaño, ya que cabe en un cubo de 6,5 x 6,5 centímetros y pesa tan solo 55 gramos.
Como ya es común en los drones, Zano también incorpora una cámara, en este caso de 5 Mpx, algo superior a la mayoría, quizá porque Zano está pensado para la captura de selfies en aquellos lugares o situaciones en las que de otra forma sería muy difícil tomar una fotografía.
Otra de sus virtudes es que además de contar con el modo “sígueme” con el que cuentan otros drones, Zano cuenta con un sistema basado en GPS e infrarrojos que le permite esquivar obstáculos. Por supuesto, para controlarlo, solo necesitamos un smartphone o tablet con Android o iOS.
Zano es todavía un prototipo que se encuentra en Kickstarter, pero si observamos lo poco que le está costando conseguir la inversión, seguro que pronto lo veremos en el mercado. (Fuente hoyentec.com)
Comentarios